Saber elegir una base aislante correcta a la hora de instalar suelos laminados es esencial para conseguir un resultado eficiente y duradero.
Instalar un suelo laminado en una estancia tiene múltiples ventajas y garantiza un buen acabado, pero si no se instala correctamente pueden aparecer problemas no deseados.
En este artículo no haremos hincapié en las ventajas o desventajas de los distintos suelos laminados del mercado. Nos centraremos más en la importancia de elegir e instalar una buena base aislante entre el suelo y el parquet. En Embalando.es disponemos de los tres tipos de bases de espuma aislantes más utilizadas en la actualidad.
La elección de un tipo de aislante u otro dependerá del subsuelo en el que vamos a instalarlo y las condiciones del entorno:
- ¿Es la estancia muy húmeda?
- ¿El entorno es demasiado frío o caluroso?
- ¿Disponemos de una instalación de suelo radiante?
Dependiendo de las necesidades de cada habitación, usted deberá decantarse por un tipo de base aislante u otra:
Base aislante para suelo laminado de espuma estándar:
La espuma de polietileno simple es la solución más económica de las tres opciones. Es la más utilizada en viviendas sin suelo radiante. Instalando la espuma como aislante amortiguará el ruido de impacto evitando que se transmita a pisos inferiores. Es capaz de disminuir el ruido entre 18 – 20 decibelios.
En las viviendas no es normal que haya grandes desniveles en el subsuelo, por lo que esta base aislante podrá corregir las pequeñas irregularidades que puedan existir en el suelo previo.
Base aislante para suelos laminados con film plástico:
Los rollos de espuma aislante con film plástico azul son la mejor opción si tienen normalmente problemas con la humedad. Su capa de plástico especial anticorrosivo, se comporta como barrera frente al vapor y la humedad que se pueda generar en el ambiente.
Como las demás bases aislantes para suelos laminados, amortigua el ruido de impacto hasta 20 decibelios.
Con una alta resistencia al envejecimiento, libre de olor y putrefacción. Ideales para instalarlas en suelos con calefacción radiante.
El plástico protector sobresale unos 10 cm para lograr una instalación ajustada a cualquier pared o esquina, quedando la base del suelo laminado completamente cubierta y sin huecos.
Gracias a su recubrimiento plástico, son idóneas para obras nuevas o donde haya que aplicarse directamente sobre cemento y no sobre el antiguo suelo.
Base aislante para suelos laminados con aluminio:
Se trata de la base aislante más polivalente y de mayor calidad de las tres. Se compone de una capa de espuma de polietileno recubierta por ambas caras con aluminio.
Como las anteriores, amortigua el ruido de impacto, compensa perfectamente los desniveles del suelo y es un excelente protector y aislante.
Esta espuma con aluminio permite ahorrar en el consumo gracias a su aislamiento térmico reflexivo. Evita las pérdidas de calor en la vivienda. Este aislante se puede colocar bajo suelo, en paredes, ventanas, tejados, garajes, invernaderos… Es el aislante más efectivo y versátil.
Como resumen, utilizar una buena base aislante para suelos laminados nos resultará más costoso pero el acabado será mejor, más duradero y con mejores resultados en cuando a la pérdida de calor y ruido se refiere.
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